El mar y tu cuerpo

Un espacio maravilloso se crear cuando estamos dentro de nuestro cuerpo, totalmente presentes, dondequiera que estemos. Ese recordatorio me di[o el mar.

Balam Mendoza

8/12/20252 min leer

En la mañana de este día, cuando comencé a escribir esto, simplemente desperté y pude sentir a mi cuerpo. Estaba relajado, tranquilo y fresco. Luego ya no quería estar en la cama y decidí ir a caminar por el malecón, ver el amanecer, las aves, sentir el aire fresco, los caminantes, quienes corren, los que toman fotos.

Luego estuve un largo tiempo sentado solo escuchando el sonido de las olas, sintiendo el viento en la piel y viendo el movimiento del oleaje, que desde niño me maravilla y puedo simplemente estar ahi. Y las aves, los cangrejos, y las palmeras aderezando la vista, haciendo lo suyo. Los sigo y veo como si fuera la primera vez y entonces me siento parte del todo, no como una figura si no el estar presente y disfrutar de la sinfonia de la que somos parte.

Esto me ha pasado mas tiempo, no solo cuando viajo, también en la ciudad, viendo los edificios. Es interesante observar como podemos estresarnos tanto y caer en el ciclo repetitivo de la rutina y de correr para todas lados sin poder tener una vida.

Si pudieras renacer hoy y no tuvieras que cambiar nada de ti o de tu cuerpo, ¿Quien serias y que eligirias?

¿No seria fantástico si pudiéramos ver el mundo con maravilla nuevamente? Si pudiéramos ver todo lo que es posible en el mundo en lugar de conformarnos con lo que se nos dice que es y que no es, lo que se puede y lo que no, lo que esta permitido y lo que no.

Esa es la invitación de la Tierra y por eso amamos viajar y estar en la naturaleza, y luego olvidamos y nos convertimos en sombras, como en el cuento de Momo, sombras de lo que fuimos, sombras tristes de nuestras preocupaciones y nuestras perdidas, de todo lo que va mal en nosotros, nuestras vidas y el mundo. En lugar de ver todo lo que ya existe y que es hermoso, empezando por nuestros ojos, detrás del velo de lo que creemos que no merecemos, ahi estas tu, el ser infinito y grandioso que realmente eres. Si tan solo esa sonrisa reflejara lo que sientes al estar en el mar, caminando en el bosque, arriba de la montaña o en un manglar. ¿Te imaginas todo lo que podrías crear entonces?

¿Y si solo te animas?

El universo te respalda y yo te echo porras.